Vuelve
Qué hacer cuando la muerte se asoma como un niño pequeño por la rendija?
Qué hacer cuando la suerte se esfuma?
Qué hacer cuando los milagros no llegan?
Qué hacer cuando se cree que se pierde la fe?
Cómo entender que el cuerpo te cambió?
Cómo entender que ayer sabías mi nombre y hoy no despiertas ni te acuerdas?
Cómo comprendo que estás ausente... aunque te veo?
Cómo te miro sin que se me parta el alma verte como no te quiero recordar?
Cómo quitarte esa sombra negra que se posa en tu hombro?
Cómo le doy luz a esos ojos que me miran de vez en cuando pero que no me ven?
Que hago para hacerte sonreir como hace tiempo?
A quién le contaré todo esto que le quiero contar?
Quiero abrazarte...
sentirte... hablarte.
Quiero que vuelvas... por favor vuelve...
no te quedes donde estás.
Despiértate.
Despiértate.
Necesito que me abraces... y me digas, "mi amor divino".
Te necesito aquí. Te necesitamos tanto.
Qué hacer cuando en los pasillos sólo huele a muerte...
Qué hacer cuando la vida se nos va de la punta de los dedos...
Dime qué hago... para que no me duela tanto...
Dime cómo entiendo esta maldición que llegó de un momento a otro y te robó la vida... de a pedazos... porque es tan cobarde que ni siquiera te suelta... ni vives... ni mueres... estás ahí... en grises...
Despiértate.
Riete.
Vuelve...
Que aquí te esperamos todos... con ganas de cerrarle la puerta en la cara a la muerte...
Vuelve.
Natalia Riveros Anzola
Qué hacer cuando la suerte se esfuma?
Qué hacer cuando los milagros no llegan?
Qué hacer cuando se cree que se pierde la fe?
Cómo entender que el cuerpo te cambió?
Cómo entender que ayer sabías mi nombre y hoy no despiertas ni te acuerdas?
Cómo comprendo que estás ausente... aunque te veo?
Cómo te miro sin que se me parta el alma verte como no te quiero recordar?
Cómo quitarte esa sombra negra que se posa en tu hombro?
Cómo le doy luz a esos ojos que me miran de vez en cuando pero que no me ven?
Que hago para hacerte sonreir como hace tiempo?
A quién le contaré todo esto que le quiero contar?
Quiero abrazarte...
sentirte... hablarte.
Quiero que vuelvas... por favor vuelve...
no te quedes donde estás.
Despiértate.
Despiértate.
Necesito que me abraces... y me digas, "mi amor divino".
Te necesito aquí. Te necesitamos tanto.
Qué hacer cuando en los pasillos sólo huele a muerte...
Qué hacer cuando la vida se nos va de la punta de los dedos...
Dime qué hago... para que no me duela tanto...
Dime cómo entiendo esta maldición que llegó de un momento a otro y te robó la vida... de a pedazos... porque es tan cobarde que ni siquiera te suelta... ni vives... ni mueres... estás ahí... en grises...
Despiértate.
Riete.
Vuelve...
Que aquí te esperamos todos... con ganas de cerrarle la puerta en la cara a la muerte...
Vuelve.
Natalia Riveros Anzola
Comentarios
Que bueno que hay algunos que vivimos cosas parecidas... y entendemos las letras y todo lo que viene con ellas.
Un abrazo!